Al momento que un DT de Copa Perú arma su once, hay un par de criterios que tiene que tomar en cuenta: la cantidad de jugadores Sub-19 y los "oriundos". El resto de cupos en la lista los puede llenar como crea conveniente, sin importar la edad o la procedencia.
Desde la temporada 2023, además de los jugadores jóvenes, se da la particularidad de que jugadores ya retirados, de trayectoria imporatante a nivel profesional, deciden volver a vestirse de corto. El caso más "sonado" podría ser el de Andrés Mendoza. El "Cóndor" se retiró del fútbol profesional en 2014, con camiseta de Alianza UDH en Segunda División. Desde entonces se dedicó a jugar Fútbol 7, a hacer comerciales y al negocio de las pizzas. Hasta que en las últimas semanas sorprendió con su regreso a las canchas, pues fichó por el Estrella Roja de Barranco. El chinchano debutó con gol (tres) y volvió a hacer noticia. Bien por él, pero tú lo recuerdas por el gol que se falló ante Ecuador (?).
Otro jugador que volvió a las canchas fue John Galliquio. El último "paradero" del exzaguero había sido Serrato Pacasmayo (Segunda 2018) y esta temporada se sumó a Deportivo Zúñiga, que juega la Liga de La Molina. También volvieron al fútbol en 2024 Víctor Cartagena (Sport Áncash FC), Willian Chiroque (Sport Pilma de Morropón) y Angelo Cruzado (Atlético San Miguel de Nuevo Chimbote). Cada uno tiene una historia detrás, con puntos para destacar. "Andlé" y "Tyson" volvieron luego de una vasta (con "v" de vaca) trayectoria, con paso en selección y clubes extranjeros incluido, Chiroque actúa en el club en el que inició su carrera y Cartagena comparte equipo con su hijo. En el caso de Cruzado, él ya ganó la Copa Perú, al igual que Cartagena.
Esta serie de reapariciones viene desde el año pasado, cuando lo hicieron jugadores como Carlos Orejuela, Wenceslao Fernández y Jair Yglesias.
Hay quienes comentan que "le quitan espacio a los jóvenes", "están para fútbol máster", "abrieron el asilo (?)". Lo cierto es que los mencionados ya hicieron su carrera, es decir, ya hicieron goles, campeonaron, fueron figuras, etc. Ya veteranos, el hecho de volver a vestirse de corto respondería más a recordar viejos tiempos, motivar a sus compañeros, a muchos de los cuales les doblarían la edad (?) y su presencia podría atraer más público a los partidos de la liga. No se les puede exigir que lleguen a la final de la Copa Perú (aunque en el caso de Yglesias, el año pasado literalmente lo hizo), más bien que orienten a sus compañeros más jóvenes, grupos entre los cuales (quién sabe) salga algún jugador de proyección y se convierta en crack.
Ahora es cuestión de jugar más distendidos, lejos de la exigencia y presión que sí tienen los clubes y futbolistas profesionales. Es como era el fútbol en sus inicios, una actividad que era solamente un juego.
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